| page_0004con millones de p[eso]s reduzidos á incobrables escripturas: Digan-
lo las pobres viudas y donzellas que en ellas tenian sus dottes
y caudales prezisos sus redittos para alimentarse: Diganlo las
comunidades huerfanas y capellanías que igualmente perdieron
los prinzipales que auian impuesto y en que confiauan su maior
seguridad; y esclamemos nosotros mesmos cada uno en su esfera
las gruesas porziones perdidas sin remota esperanza de perzeuirlas.
Tambien es practicam[en]te recnozido (y no sin dolorosos sollozos) que
en muchos de estos factores del commerzio instrumentos para el
dispendio de los jeneros, que con frequenzia conduzen a estte rey-
no las flotas y vajeles[?] de la europa se esperimenta la mesma
infidelidad pues teniendo crezidos deuitos contraidos con sus fo-
mentadores quando esperan la correspondenzia ó paga integral (aun-
que tengan posibilidad de hazerla) la retienen en la maior parte
pretestando atrasos de dependenzias (con espezialidad) al tiempo
de los despachos de flotas y con las porziones que no pagan (deuien-
dolo hazer) emplean a los flotistas jeneros al contado interesan-
dose con el caudal ajeno en la Gananzia que hexa propia desu
dueño y no causando á este solo el atraso de carezer de su bene-
fizio reporta el delos premios que se le irrogan buscando para
su correspondenzia y entero a los interesados, la porzion rete-
nida (en estrechos y rigorosos terminos de su propartida) aventu-
rando muchas vezes su credito por este motibo, con que siendo
una cadena eslauonada todos los negozios de los mercaderes de Me-
xico con los factores de tierra adentro y de estos con los mineros
Azenderos y rancheros de los Zircumvezinos contornos a sus man-
siones, en qualquier evento no teniendo los segundos y terzeros
mas fundam[en]to, ni formalidad en las correspondencias que la espre-
sada, quien reporta los atrasos somos los que uiuimos en [...]
esta ciudad pues ni aun sin gran dificultad y crezidisimos gastos
tenemos abzion a recombenir de paga de otra suerta que por car-
tas de que se desendienden en el todo o satisfazen con
fribolal escusas cuia benificazion es inaberiguable y menos
el estrauio de caudales y aunque lo fuese se toleraria por
| page_0004con millones de p[eso]s reduzidos á incobrables escripturas: Digan-
lo las pobres viudas y donzellas que en ellas tenian sus dottes
y caudales prezisos sus redittos para alimentarse: Diganlo las
comunidades huerfanas y capellanías que igualmente perdieron
los prinzipales que auian impuesto y en que confiauan su maior
seguridad; y esclamemos nosotros mesmos cada uno en su esfera
las gruesas porziones perdidas sin remota esperanza de perzeuirlas.
Tambien es practicam[en]te recnozido (y no sin dolorosos sollozos) que
en muchos de estos factores del commerzio instrumentos para el
dispendio de los jeneros, que con frequenzia conduzen a estte rey-
no las flotas y vajeles[?] de la europa se esperimenta la mesma
infidelidad pues teniendo crezidos deuitos contraidos con sus fo-
mentadores quando esperan la correspondenzia ó paga integral (aun-
que tengan posibilidad de hazerla) la retienen en la maior parte
pretestando atrasos de dependenzias (con espezialidad) al tiempo
de los despachos de flotas y con las porziones que no pagan (deuien-
dolo hazer) emplean a los flotistas jeneros al contado interesan-
dose con el caudal ajeno en la Gananzia que hexa propia desu
dueño y no causando á este solo el atraso de carezer de su bene-
fizio reporta el delos premios que se le irrogan buscando para
su correspondenzia y entero a los interesados, la porzion rete-
nida (en estrechos y rigorosos terminos de su propartida) aventu-
rando muchas vezes su credito por este motibo, con que siendo
una cadena eslauonada todos los negozios de los mercaderes de Me-
xico con los factores de tierra adentro y de estos con los mineros
Azenderos y rancheros de los Zircumvezinos contornos a sus man-
siones, en qualquier evento no teniendo los segundos y terzeros
mas fundam[en]to, ni formalidad en las correspondencias que la espre-
sada, quien reporta los atrasos somos los que uiuimos en [...]
esta ciudad pues ni aun sin gran dificultad y crezidisimos gastos
tenemos abzion a recombenir de paga de otra suerta que por car-
tas de que se desendienden en el todo o satisfazen con
fribolal escusas cuia benificazion es inaberiguable y menos
el estrauio de caudales y aunque lo fuese se toleraria por
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