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señor capitan don martin caietano fernandez de peralta
Muy señor mio y estimadisimo y mi favorecedor mis muchas ocupaciones no me han permitido a vuestra merced y ahora lo hago a una fortuna por las del señor gobernador esta inteligente puede decir otra cosa de los fatales suscesos de nuestras armas con los que el de estos barbaros crece al paso que nos debilitan las fuerzas y dando de un peligro en otronos hallamos en el mas peligroso exterminio que se puede considerar, con solos cincuenta hombres de armas entre ellos siete soldados y otros tres que tienen cueras esperando algo razsu intuición de tanto sin numero de enemigos pues estos adelantados con los triunfos que han conseguiido no habra dificultad. que no emprendan y aunque estamos con la mayor prevencion y vigilancia se puede esperar un mal susceso por la desproporcion por las fuerzas a que se sigue que si las tropas arregladas desmayan los que sirven a su costa y estan forzados que empeño puedes hacer.