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San Nicolás de la Paz.
San Juan de las Palmas.
Pueblo nuevo.
Santero.
Loricá.
San Nicolás de Barí.
S. Bernardo Abad.
Morales.
Babilla.
Tablada.
Tiquicio de adentro.
Tiquicio de afue-
Majagua.
Nechi.
San Marcos.
San Pelayo.
Zerete.
Zienega del Oro.
San Carlos de Golosina.
San Gerónimo de Buenavista.

La Capital es Ciudad grande, hermosa y de muy buenos edificios, fundada por Pedro de Heredia el año de 1533, a orilla de una gran Bahía muy cómoda que tiene mas de 2 leguas de largo, llamóse Calamari en tiempo de los Indios, que significa en su idioma tierra de cangrejos, por los muchos que hay en ella: está situada en una Isla arenosa, que formando un paso estrecho, da comunicación a la parte que llaman Tierra Bomba; por el Levante se comunica por un puente de madera, con el arrabal llamado Xrxhnani, que está en otra Isla, y se da la mano con el Continente, por otro puente de madera semejante al primero. Está bien fortificada, y reside en ella un Gobernador con título de Capitán General, dependiente del Virey de Santa Fe, habiendo sido independiente hasta el año de 1739, ademas del recinto y bastones de la plaza, tiene una media luna que defiende la Puerta de Tierra, y a poca distancia el Castillo de San Felipe de Baraxas, situado en una eminencia, y por la parte de la Bahía los Castillos de San Luis, Santa Cruz, Castillo Viejo, San Joseph, San Felipe y el Pastelillo, que reedificó a la moderna el año de 1754 el Teniente General Don Ignacio de Sala, con los nombres de San Fernando, San Joseph, el Angel y el Pastelillo: la Iglesia Catedral es magnífica, en que se incluye la Parroquia del Sagrario, y tiene ademas de ésta otras dos llamadas la Trinidad y Santo Toribio: Conventos de Religiosos, de San Francisco, Santo Domingo, San Agustin, Recolección de San Diego, la Merced y San Juan de Dios que es Hospital, y en lo alto de un monte muy elevado, extramuros de la Ciudad, distante un quarto de legua el de Agustinos Descalzos, llamado nuestra Señora de la Popa, a quien saludan y rezan una salve todas las embarcaciones quando lo descubren, Colegio que fue de los Regulares de la extinguida Compañía, de magnífica arquitectura y dos Monasterios de Religiosas, uno de Santa Clara, observantes de la Regla de San Francisco, y el otro de Carmelitas Descalzas. Casi a la misma distancia tiene fuera de la Ciudad el Hospital de San Lázaro para leprosos, cuya enfermedad es endémica del Pais; tiene también Tribunal de la Inquisición y establecido el año de 1610, y es uno de los tres que hay en la América, igualándose en esto con las Metrópolis de Lima y México. Es cabeza de Obispado erigido el año de 1534 por la Santidad de Clemente VIL La Bahía es abundante de peces de varias especies, pero infestada de lobos marinos: en ella esperaban los Galeones que iban de España la noticia de la llegada del comercio del Perú a Panamá, para pasar a Portovélo a celebrar la feria, y después de concluida volvian a ella para hacer las provisiones y emprehender el viage de regreso a la Habana: el clima de esta Ciudad es muy cálido; desde Mayo hasta Noviembre, que es el invierno, los truenos, las lluvias y tempestades son muy repetidas; pero de esta incomodidad sacan, el fruto de llenar las cisternas que llaman aljibes, y es la única agua que se bebe, por lo qual le tienen todas las casas: desde Diciembre hasta Abril, que es el verano; hace un calor tan excesiva que ocasiona un continuo sudor, que debilita los cuerpos y tiene los semblantes pálidos y descarnados, y sin embargo sus naturales gozan buena salud, y es muy común pasar las gentes de 80 años: la extrañeza de este clima produce varias enfermedades terribles, como el vómito negro, que es mas común en los forasteros y gente de mar, de que escapan pocos; pero al que sale de él no le repite; la lepra 6 mal de San Lázaro; la culebrilla que es un insecto que se cria entre los tegumentos, y causa un tumor que suele terminar en cangrena, y el pasmo o convulsiones: tiene ademas de estas incomodidades la de varios insectos que abundan en las casas, como cucarachas, niguas, alacranes, cienpies y morciélagos: los árboles mas grandes son el caobo, cedro, maría y árbol de bálsamo: del primero hacen las canoas de una sola pieza para el tráfico y la pesca: el cedro encarnado es mejor que el blanquizco, y los dos últimos, ademas de la utilidad de la madera que es compacta, olorosa y de bello encarnado, destilan el bálsamo admirable que llaman aceyte de María y bálsamo de Tolú: hay también tamarindos, nísperos, zapotes, papayas, guabas, cañafistolos y manzanillos que producen frutas delicadas y gustosas; y el del último es venenoso, de modo que muchos ignorantes se engañan al ver unas manzanas pequeñas tan hermosas, y se hinchan luego que las han comido, y algunos durmiendo a la sombra de él, siendo el antídoto el aceyte tomado interior y exteriormente.